Se escucha un ruido en el firmamento las nubes se hacen a un lado
Se abren las puertas del cielo...María esta llegando
Su hijo Jesús le pide...Madre detén tu paso
No mires hacía la tierra aún tienen clavos mis manos
Los ángeles que la aguardan repliegan tristes sus alas
preguntándose entre ellos quién secara sus lágrimas
María quiere saber si es cierto lo que le han contado
No se llaman más hermanos todo es muerte y desamparo
¡Hay!...Como avanza la marcha de la hambruna
Sus cuerpos son fantasmales sus huesos a flor de piel
que van rozando el suelo regando con su sangre la tierra seca y resquebrajada
Sus ojos despavoridos rostros desencajados brazos vencidos al lado de sus cuerpos
vientres hinchados tripas que reclama por su alimento
Madres caídas en el camino senos secos que no tiene que ofrecerle
a esa vida que lucha por ser vivida
Se agregan a la marcha otros seres fantasmales
se toman de las manos para así sostenerse
El so ha dejado de enyagar sus pieles la piadosa noche los cubre con su manto
Los cuervos descansan en sus nidos esperando por su almuerzo
Las lágrimas de María van cayendo hacía la tierra
En cada una de ellas un alma viaja hacía el cielo
Se cierran las puertas del firmamento
Cubierta toda en su manto María se va alejando
Los ángeles muy tristemente en silencio la acompañan a María en su doloroso duelo.